ORÍGENES Crónica HipHop 1

13/05/2017

En los orígenes de cada amante de la cultura HipHop, hay un big bang que provocó la chispa, creando el caldo primigenio en el que se cultivaron y cobraron vida sus primeras experiencias, para algunos fue una canción que escucharon en la radio a edad temprana o un casette que cayó por un acertado error del destino en su poder, con una maqueta o un disco mágico que cambio su vida, para otros fue culpa de un compañero de clase al que vieron rotulando un boceto en la pasta trasera del libro de matemáticas, quizás se debió a la primera vez que vieron a un breaker girar sobre su cabeza, con todo el peso de su cuerpo mantenido en posición invertida sobre una superficie brillante o a lo mejor la chispa saltó en el primer evento al que acudieron, siendo adolescentes, en el que había un dj rascando discos para que la gente bailara, vibrara y se estremeciera.
Da igual como mordieras el anzuelo o como te inocularan el veneno, si eso sucedió, si esa chispa se produjo en tu adolescencia, está cultura te habrá acompañado durante años y te seguirá acompañando y guiando, seguramente y casi sin remedio, hasta el fin de tus días.
Algunas veces llegaras a odiarlo, perderás la fe, y te revolverás por lo que ven tus ojos y oyen tus oídos, es muy posible incluso que reniegues de los nuevos talentos o las nuevas ramificaciones de la música, la moda o la cultura hiphop, eso es completamente normal por efecto de la nostalgia, la sufren todos los que sientieron su verdadera esencia, probablemente hasta necesites oxígeno en ocasiones, el rap siempre se ha nutrido de otras músicas, es algo intrínseco y sus amantes siempre pasan por épocas en las que necesitan aislarse y volcarse en otros ritmos, otras armonías y en distintas cadencias de bpm's pero siempre, siempre, irremediablemente se acaba volviendo a recaer en el vicio, como un fumador que agarra un pitillo en una cena de empresa, tras 5 años sin fumar y llega a casa apestando a tabaco.
Los 4 elementos que engloban la cultura hiphop son a su manera especiales en sí mismos, independientes, a la vez que necesarios entre si y aunque cada cual ha buscado su sitio en el mundo y se ha forjado con personalidad propia dentro de este entorno global, cada vez más desarraigado, en el que vivimos ahora, siempre han sabido coexistir en armonía para no distanciarse demasiado entre ellos, sabiendo retroalimentarse cuando lo han necesitado y ayudándose en perfecta simbiosis cuando los tiempos lo han requerido.
Me he aventurado a escribir esta crónica, que espero sea la primera de muchas otras, en busca de una trasferencia de información desde un corazón a otro, una piedra no es capaz de actuar por si sola, necesita otra con la que chocar para provocar la chispa que enciende el fuego y aunque en un mundo tan globalizado que gira a un ritmo vertiginoso, parece que la esencia ya no tiene esencia, quiero pensar que lo mágico sigue existiendo y se siguen produciendo big bangs todos los días.
Gracias por vuestro tiempo y espero poder reflexionar con vosotros y vosotras en un futuro cercano.